Los minoristas que estén dispuestos a considerar la sostenibilidad de sus operaciones logísticas como un pilar estratégico de la organización se beneficiarán de la reducción de los costes operativos y conquistarán a la nueva generación de consumidores.
Los minoristas deben enfocarse en:
Para reducir el exceso de stock y los desperdicios tendrán que implementar diferentes modelos de compra según el perfil de los productos, colaborar con los proveedores para mejorar los modelos de servicio, reducir las pérdidas por manipulación de artículos y buscar materiales sustitutivos sostenibles. En el transporte también tendrán que optimizar las rutas, acercar el inventario al cliente final y animar a los clientes a ir a recoger en lugar de esperar la entrega.